La habitación tenía un buen precio.

Las vistas al puerto eran impresionantes. Nuestra habitación era espaciosa y lujosa, con climatizador, minibar y un cómodo sofá. La ubicación del hotel era excelente, con el Palacio de Amalienborg cercano.

Habitaciones con vistas al puerto. El trato recibido ha sido increíble.

Y es que estábamos en un lugar brillante a poca distancia del Nyhavn. Y es que estábamos a pocos pasos del centro de la ciudad, de los autobuses y del muelle. La habitación era cómoda y teníamos una vista magnífica al puerto. El climatizador, el minibar y el sofá fueron un toque muy agradable.

Este lugar tiene habitaciones amplias y baños bonitos, con una ubicación increíble y aparcamiento en el lugar; de noche, se puede ver el Nyhavn.

El hotel está muy bien situado, linea directa en metro con el aeropuerto, en todo el centro, a 2 minutos andando del puerto, Nyhaun. Las calles peatonales están a 7 minutos, con un agradable paseo por todo el puerto. Muy buen servicio, limpieza, camas comodas, ordenadores con internet. Completamente encantados con este hotel. Dispensador de hielo en los pasillos, para los que interese tema copillas.

En general el hotel es muy correcto.

Quizás el precio del desayuno (pero en la City, todo es caro... asi que...)

Las habitaciones son modernas y tienen vistas al mar, además, la ubicación es excelente, cerca del Palacio de Amalienborg, con accesibilidad a panaderías y farmacias cercanas.

El hotel es muy confortable y las habitaciones tienen un tamaño adecuado y son limpias No vale la pena pagar más por las vistas al mar. El desayuno es un poco caro y los niños para desayunar pagan a partir de cualquier edad a mitad de precio.

La ubicación del hotel es muy buena, así como sus servicios. El personal atento y correcto. Las habitaciones amplias y cómodas.

La habitación tenía un buen precio. Estaba frente al mar.- El hotel estaba muy bien colocado para moverse por Copenhague.- Tan cerca de los mercados de navidad, de todos los principales lugares de interés y del centro de la ciudad.

situacion,servicios

habitaciones un poco pequeñas,parking caro

El confort de sus habitaciones y su ubicación.

El hotel es lujoso y romántico, con un personal extremadamente amable. Las habitaciones son de buen aspecto y recién decoradas, con camas cómodas. Su ubicación al lado del Nyhavn es ideal y bonita. El restaurante es fabuloso para cenar.

Las piezas con vista al mar son tranquilas en cuanto al ruido exterior, con bonita vista, y las Dobles Deluxe tienen un tamaño adecuado. Es posible obtener un Late check-out pagando una tarifa horaria.

La mitad de las habitaciones tienen vista a la calle y la aislación acustica de las ventanas (que están sobrepuestas en el vano) es muy pobre. Asimismo la aislación acústica interior es muy mala (esto es válido tanto para las habitaciones con vista al mar como aquellas con vista a la calle). Tanto las habitaciones como los baños dan la sensación de antiguedad.